En la Noche de San Silvestre
Esta ultima noche, llamada de San Silvestre porque se recuerda a ese papa en su partida a la Patria Celestial, ocurrida en el anochecer del año 335, don Alejandro Avilés, nuestro amadísimo Profe, llegó a participar, en 1915, en el misterio gozoso de la vida
En memoria del eximio poeta, educador y periodista, reproduzco aquí esta joyita hallada en su libro Los claros días, publicado en 1975, el año que obtuve el premio mayor de iniciar una fraternal amistad con él.
Viento
Viento desgarradura de la noche
violento sopla.
Donde la vida tiembla
viene a quebrar la hoja.
Pálido viento de las crestas áridas
sopla su polvo.
Hiende el espacio de la luz, voltea
toda la oscuridad contra los ojos.
Alejandro Avilés (1915-2005)